

Nos presentamos en el Mercadona un poco antes de que cerraran sus puertas y compramos kilos de papel higiénico, para que el no tenga culturilla general, es el popularmente llamado papel del culo, o del ojete.
Así que nuestra ayudanta (porque teníamos ayudanta y todo para vestirnos) se puso manos a la obra y en medio de un botellón en frente de la Topik nos disfrazamos, uno se quito el traje antes de terminar el botellón, otro nada mas llegar a la zona de la movida, y el menos tonto de todos dejo que la erosión y el desgaste siguieran su camino natural de la vida, hasta que poco a poco se fue desintegrando.

3 comentarios:
Sois muy cabrones lo sabiais?
No tiene ni puta gracia!
Hijos de puta!
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